El Yasuní significa ahora una nueva esperanza para los caso 3.000 huaoranis, a quienes se ha ofrecido ser los primeros en salir de la pobreza. El grupo amazónico, que ha tenido una relación compleja con la cultura occidental, a la conoció en la primera mitad del siglo 20, vivió inmerso en una serie de cleintelismos con las empresas petroleras transnacionales que preferían otorgar objetos de alto valor sin planificación ni incidencia sobre el desarrollo.