El auditorio José Mejía Lequerica de la Asamblea Nacional del Ecuador recibió a más de 300 niños y niñas con sus familias. El evento inició con la presentación de un grupo de danza folclórica a cargo de los niños del Centro del Muchacho Trabajador, quienes con ponchos y anacos deleitaron a los asistentes a la vez que entregaron un mensaje claro: no más trabajo infantil.
La asambleísta Soledad Buendía compartió del evento y también aportó con su criterio para el debate. Ella recordó que, en el Ecuador,cerca del 90% de niños y niñas de entre 5 y 14 años asisten a la educación básica, y que el 67% de adolescentes entre 15 y 17 años, asiste al bachillerato. El 87% de ellos lo hace en escuelas y colegios públicos, sin costo alguno. En estas unidades educativas reciben desayuno, libros y uniformes, de forma gratuita.
"¿Cómo se podía hablar de igualdad y justicia cuando, por ejemplo, un niño de una provincia amazónica se educaba con un solo profesor para todas las materias, sin servicios básicos, sin acceso al Internet? ¿Cómo ese niño podía competir con otro de la capital que sí tiene acceso a esos servicios? Esa es una fuente de injusticia e iniquidad que la Revolución Ciudadana ha atacado desde el primer día", dijo en su intervención la legisladora que representa a las parroquias rurales de Pichincha.
Ecuador declaró a su territorio libre de trabajo infantil en basurales en el año 2011, después de retirar a 2160 niños de estos espacios insalubres y darles atención en igualdad oportunidades para educarse y desarrollarse. En ese mismo año, 64 niños y niñas dejaron los camales.
El evento rompió con la monotonía cuando entraron al escenario los niños y niñas del Centro del Muchacho Trabajador. La melodía y ternura de la voz de su coro y la increíble destreza del equipo de baile moderno hicieron vibrar al auditorio, que aplaudió de pie el talento de estos niños.
El proyecto salesiano Chicos de la Calle también participó del evento. Las voces de su coro, compuesto solo por niñas, interpretaron melodías tradicionales que cautivaron a los asistentes.
La fiesta para la erradicación del trabajo infantil cerró la tarde con un broche de oro: Los niños cantores del pueblo, coro del Ministerio de Inclusión Económica y Social. Ellos cantaron varias de sus canciones emblema como "Por ti vamos a vencer" o "Amor y control".
Integrante de la Comisión De la Biodiversidad y Recursos Naturales Visita mi Perfil
